El 8 de noviembre del 2017, cuarenta y cuatro ciudadanos argentinos de fuerte vocación, alistados en la Armada, se embarcaron en la misión de la custodia de nuestra soberanía marítima en el Atlántico Sur. Siete días después la unidad perdió contacto con la base y lo que sigue es historia conocida respecto a sus destinos.
Desde la comisión de Desarrollo Cultural e Histórico “ARTURO JAURETCHE” y en el marco de la conmemoración por el bicentenario del primer izamiento de la bandera nacional en las Islas Malvinas, creemos justo y necesario que la sociedad de Río Cuarto- y todo el pueblo de la nación en su vasto territorio- rinda homenaje, en su 3er aniversario, como registro del sentido y respetuoso reconocimiento a los 44 submarinistas del ARA SAN JUAN que dejaron su vida en el ejercicio patrio de la custodia de nuestra soberanía marítima en el Atlántico Sur, para abrazar desde el llano a las familias en su dolor, para intuir y reconocer nuestra falta de consciencia marítima y también para mantener bien en alto la memoria colectiva e ir en el sentido de la historia para que la verdad se abra paso.
En la dinámica de una nación aún inconclusa y llena de pleitos sin fallar, el homenaje a los argentinos y argentinas con vocación y sacrificio heroico, más cuando de Patria y soberanía se trata, es un mojón que nos traza el camino hacia la búsqueda de la identidad a través de las formulaciones de un discurso propio tendiente a romper los lazos de las dependencias y la realización histórica de lograr un Estado integrado de la Nación Latinoamericana.
También intentamos poner en cuestión lo sucedido con nuestro ARA SAN JUAN respecto a lo siguiente: La tragedia dejó al descubierto la calamitosa situación en la cual se encuentra la institución militar. Por tanto nos resulta de importancia reflexionar sobre el valor de disponer de fuerzas militares en el ejercicio de su deber de custodia del interés nacional, de nuestra soberanía, tal cual lo estipula la Constitución Nacional. Necesitamos unas Fuerzas Armadas que defienden la soberanía nacional y se integren con el pueblo en un proyecto de emancipación, y para ello se hace necesario establecer los lineamientos centrales de un proyecto nacional que las integre, ya que, como decía Jauretche: “sin política nacional no hay ejército nacional, y viceversa”, y la decisión es política.
La “causa” ARA SAN JUAN ya es una bandera del pueblo, lo certificamos con los incontables homenajes que se suceden en cada ciudad o pequeña localidad, aún a cientos de quilómetros de las zonas costeras, como es el caso de Rio Cuarto. Lo vemos en el nombramiento de plazas, puentes y escuelas. Es que la relevancia del protagonismo popular en nuestra historia ha sido incansablemente relativizada o ignorada. No fue así en la Guerra de Malvinas en 1982. La causa Malvinas continúa vigente en el corazón de todos los que no aceptamos más el colonialismo y reclamamos que vuelva a flamear nuestra bandera en las islas.
Muchos han despreciado el ingenio y el poder del pueblo, pero a largo plazo, han pagado caro su error. Los pueblos siguen la táctica del agua. Aprisionada, se agita y pugna por desbordar; si no lo consigue, trabaja lentamente en los cimientos, buscando filtrarse. Si nada de esto logra, acaba en el tiempo por romper el dique, lanzándose en torrente. Son los aluviones. Lenta o tumultuosamente, el agua, igual que los pueblos, pasa siempre.
Porque si la Patria ha de llorar, que lo haga en todos sus puntos cardinales de su extensión y fundida en un abrazo popular que arrime cariño y consuelo al dolor de las familias de nuestros 44 centinelas que custodian eternamente nuestra soberanía de nuestro mar del Sur y devuelva orgullo a nuestros hombres y mujeres de vocación y arrojo.
Desde la Comisión de Desarrollo Cultural e Histórico «Arturo Jauretche» de la Ciudad de Río Cuarto abrazamos a los familiares de nuestros 44 héroes y exigimos MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA!
POR: Comisión de Desarrollo Cultural e Histórico «Arturo Jauretche» de la Ciudad de Río Cuarto.