En épocas de paritarias salariales con «estimación presupuestaria del 29% anual», cabe preguntarse ¿qué debatimos los trabajadores?
¿Partimos de lo ya dado, lo estipulado y a partir de ahí definimos un porcentaje, o nos preguntamos cuánto necesitamos para vivir dignamente? La Federación de Aceiteros lucha, desde hace 10 años, por definir salarios y no porcentajes. Parte de lo que necesita un trabajador de acuerdo a la zona en la que vive y teniendo en cuanta las necesidades contempladas en la constitución y la Ley de Contrato de Trabajo. Incluye los datos del INDEC sobre la canasta básica. En cada discusión paritaria solicitan los balances de las empresas del sector.
Por estos días los docentes de todo el país luchan para no seguir cobrando salarios que en muchas provincias los dejan por debajo de la línea de pobreza. El 50 % de los trabajadores de nuestro país está en esa condición.
Si se estipula un aumento salarial del 35% sobre el salario ya cobrado y teniendo en cuenta la inflación proyectada, seguiremos reproduciendo la misma situación. Cambiar el paradigma de cobrar salarios por inflación por el de definir cuánto necesita el trabajador para vivir, es uno de los tantos desafíos de la época.