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a Nueva Constitución debe dar cuenta de la demanda del 18 de octubre de 2019, que se validó el 25 de octubre de 2020 y que se volvió a validar el 16 de mayo de 2021. Chile necesita una Constitución que garantice tres cosas como piso.
1. Una Constitución que cree posibilidades para que el Estado dé orientación estratégica al desarrollo económico. Esto significa el fin del rol subsidiario del Estado de la Constitución de Pinochet, donde la sociedad termina sometida a los poderes económicos que reproducen y acentúan sus privilegios.
2. A partir de lo anterior: Un Estado social de derechos que asume la función de asegurar la educación, salud, seguridad social, vivienda, cultura. Eso es innegociable e inherente a la dignidad de la persona humana.
3. Una forma de hacer política que pueda relegitimarse permanentemente ante el pueblo, es decir, ante el soberano. Fin a la democracia tutelada por el mercado y las FFAA. Para el pueblo lo que es del pueblo.