Consumado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el Senado ingresaron a comisión dos proyectos de ley para crear un fondo destinado a pagar la deuda con el organismo internacional que llegaría en total –según CIFRA– a 57.674 millones de dólares (de capital más intereses).
Se trata, por un lado, de constituir un fondo nacional para la cancelación de la deuda con el FMI y también, para ello, modificar la Ley de Entidades Financieras (aprobada en la última dictadura cívico-militar), a los fines de modificar las excepciones del secreto bancario, bursátil y fiscal.
El proyecto de ley propone la constitución de un fondo en moneda extranjera (dólares) de aquellos que tengan activos en el exterior sin declarar. Si los alcanzados declararan sus activos antes de los 6 meses, deberán realizar un aporte del 20% en dólares.
En caso de declarar los bienes pasados los seis meses de la entrada en vigencia de la ley, la alícuota subirá al 35%, y quienes no se allanen al pago de este aporte «corren el riesgo de tener una pena en prisión».
“No es blanqueo ni voluntario, es persecutorio”, dijo Oscar Parilli, senador por el Frente de Todos (FdT) y autor del proyecto. “El objetivo es la cancelación total de la deuda con el FMI”, planteó en la reunión con representantes gremiales, realizada en la mañana de este miércoles en el Senado de la Nación.
Militar la iniciativa
El arco de dirigentes gremiales presentes en la reunión de este miércoles dio apoyo al proyecto. “Si no hacemos nada, la inercia va a llevar a que el hilo se corte por lo más delgado. Este proyecto abre una perspectiva, tenemos que terminar con el secretismo bancario y bursátil de una ley que viene de la última dictadura”, dijo Hugo Yasky, titular de la CTA de los Trabajadores y también diputado nacional por el FdT. También manifestó que tienen intención de “militar esta iniciativa, abrir este debate, convocar a los cuerpos de delegados y prepararnos para construir la presencia del movimiento sindical en las calles”.
“No vamos solamente a apoyar esta ley, la vamos a militar en cada plaza de Argentina”, señaló el dirigente canillita y Secretario de Políticas Económicas y Sociales de la CGT, Oscar Plaini. Mencionó a Estados Unidos como un ejemplo donde se “acabó con el secreto bancario de la banca suiza” y planteó que lucharán “para que la paguen los que la fugaron”.
Héctor Amichetti, dirigente gráfico integrante de la Corriente Federal de Trabajadores (CFT), manifestó que no se le puede “pedir solidaridad a aquel que tiene como sentido multiplicar su rentabilidad de la manera que sea” y agregó: “tenemos que generar conciencia en nuestros delegados para ganar esta batalla. La última fue la del Frente de Todos para que llegara al gobierno, la logramos peleando en las calles. Hay que pelear si se quiere justicia social”.
Hugo Godoy, secretario general de la CTA Autónoma, planteó que desde aquella “dictadura genocida que tenía a Domingo Cavallo como presidente del BCRA, la deuda externa fue un martirio. Las deudas se pagan pero las estafas no. Necesitamos mecanismos para que esa ley la paguen quienes nos estafaron”.
Contra la fuga
La fuga de capitales, técnicamente conocida como Formación de Activos Externos (FAE), fue uno de los puntos que se empezaron a debatir en Plenario de Comisiones del Senado, también realizado este miércoles, pero en el transcurso de la tarde.
La preocupación está en los dólares que se externalizan del sistema y van al “colchón” como ahorro, o directamente a cuentas fuera del país. A este último punto apuntan los proyectos.
“Los residentes argentinos tienen en el exterior más dólares que los que Argentina debe. La estimación es de unos 360.000 millones de dólares que están declarados por personas físicas y/o jurídicas”, señaló ante los senadores la economista Julia Strada, también directora del Banco Nación. El tema es que cuando se quiere “depurar ese número se encuentra con que en AFIP ese número es de 70.000 millones de dólares. ¿Por qué hay 70.000 si en el gobierno de Mauricio Macri hubo un blanqueo en el que se declararon 117.000 millones de dólares?”, se preguntó.
Otro de los economistas presentes fue Horacio Rovelli, quien planteó que los “secretos bancarios fueron impuestos por dictaduras militares”. Y agregó que “con esta ley la comisión bicameral puede llamar al CEO de Arcor y preguntarle como hicieron para comprar esos dólares”. Rovelli se refirió a las 100 primeras empresas compradoras de dólares en el período 2016-2019 cuyos estados contables no reflejan la compra de divisas realizadas en este período. El propio Banco Central de la República Argentina (BCRA) realizó un informe sobre la fuga de capitales en ese período.
En cuanto a la necesidad el proyecto, Strada dijo que “necesitamos dólares, ya que el 74 por ciento del endeudamiento que tiene argentina está en moneda extranjera. Argentina tiene un restricción externa como en la década del 60, agravada por la desregulación de la cuenta capital desde los años 70”.
Ricardo Aronskind, otro economista presente en el Senado, señaló que este proyecto de ley tiene «un elemento distributivo indiscutible dado que en vez de que la inmensa mayoría del pueblo argentino tenga que hacerse cargo de los 44 mil millones de dólares, ese esfuerzo se concentre en particular con el recorte a los argentinos que evadieron y la sacaron del país».