El pasado 8 de abril, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas y el fundador y director ejecutivo de Ualá, Pierpaolo Barbieri, acordaron que destinarán 1.000 millones de pesos, a través de un fondeo del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP), con el objetivo de incluir microcréditos de la compañía destinados a la realización de inversiones productivas y promover el acceso al financiamiento de más personas.
Kulfas resaltó que las empresas más chicas accedan al financiamiento de manera ágil y a menores costos. “Es importante que podamos lograr que las empresas más chicas, los comercios, las pequeñas industrias accedan al financiamiento de manera ágil y a menores costos; y que las instituciones financieras empiecen a ampliar su abanico de clientes”, dijo.
La Asociación Bancaria criticó en un comunicado la medida e indicó que “es inadmisible que en lugar de canalizar la inclusión financiera y los créditos de las Pymes a través de la Banca Pública, y dentro del sistema se realice un convenio con una empresa totalmente informal que ni siquiera es un banco, y se destinen millones de pesos para tal efecto”.
El sindicato liderado por el también diputado del Frente de Todos, Sergio Palazzo, indicó que “una decisión estratégica de orden nacional no debe ser realizada a través de una aplicación”.
