“La CGT tiene que sacar los trabajadores a la calle para decirle a estos tipos que se dejen de remarcar, que es lo que está perjudicando el salario”, dijo el secretario general de la CGT Pablo Moyano, tras repudiar los dichos del propietario de la cadena de supermercados La Anónima, Federico Braun, en el encuentro de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) realizado el 7 de junio. Braun dijo, riéndose, que frente a la inflación lo que hacían en su empresa es remarcar precios todos los días.
“Se burlan del pueblo argentino y hace 50 años manejan la economía del país”, manifestó Moyano, “queda demostrado que al gobierno le falta más fuerza para sentarse con estos tipos y decirles ‘Basta’”. En ese marco es que llevará a la próxima reunión de la Comisión Directiva de la central, la propuesta de movilizar.
Para Moyano, “los empresarios llevan adelante un plan de desgaste al gobierno. Todos se ríen, nadie responde. Hay un plan sistemático que incluye a los medios de comunicación, a la oposición y a la Justicia”.
Unidad Piquetera con CGT y CTA
Representantes de las más de 25 organizaciones sociales que conforman la Unidad Piquetera tuvieron el miércoles 8 de junio un encuentro con dirigentes de la CGT y otro con la CTA Autónoma. A ambas le reclamaron “un paro y un plan de lucha”.
Así lo manifestaron en un comunicado emitido al finalizar las visitas, a las que llegaron marchando con sus organizaciones.
“Trajimos la necesidad de profundizar medidas de acción directa que frene esta ofensiva contra el salario”, dijeron desde el Polo Obrero, preocupados porque “no vemos a las centrales con el reclamo que debería estar fuertemente en la calle”.
El pasado 10 de mayo y desde 50 localidades de las distintas provincias, comenzó la Marcha Federal contra el ajuste que desembocó dos días después en un acto en Plaza de Mayo. “La situación no da para más”, expresaron entonces en relación a la condición de emergencia económica en la que viven las familias de los barrios populares y a la pobreza que alcanza a más del 40% de la población, incluso aquella con empleo y salario.
El pedido dirigido a todos los gobiernos fue la ampliación del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) para todos los trabajadores desocupados y el aumento de los montos de la Asignación Universal por Hijo o Hija (AUH) y de los diferentes programas de ayuda social y promoción del empleo. En esos días, “para compensar la suba de precios de los alimentos y bienes de primera necesidad en los últimos meses”, el gobierno nacional dispuso el IFE 4 de 18.000 pesos como Refuerzo de Ingresos de los demás planes y programas, monotributistas de las categorías A y B y trabajadores informales no registrados, a pagarse en dos cuotas, en mayo y junio. Según el ANSES, este refuerzo llegaría a 7,5 millones de personas.
Sobre esos reclamos, Pablo Moyano señaló que “son una realidad, nadie la puede tapar”. En principio, Moyano coincide con que el salario universal por hijo o hija deje de ser limitado. “De 6 millones de trabajadores registrados, solamente 2 lo cobran”, aseguró.
En la CGT la Unidad Piquetera, fue recibida por Omar Plaini (Sindicato de Canillitas). “Encontramos puntos en común”, dijo Silvia Saravia, del Movimiento Barrios de Pie. Entre ellos, el pedido de aumento del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) que ya cursó al gobierno también la esta central.
“Coincidencias en cuanto a la situación nacional”, repasó el titular de la CTA-A, Ricardo Peidró, tras la reunión. “Y con estrategias que hemos discutido en nuestra central, que son otras, pero indudablemente pueden coincidir en cuanto al deterioro salarial y la cuestión social”.