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l Centro Empresario Comercial, Industrial y de Servicios de Río Cuarto (CECIS) publicó su informe del sector Servicios correspondiente a diciembre 2023, el cual indica que hubo una caída del 16,02% en la cantidad de prestaciones, a comparación de diciembre 2022.
La merma es ininterrumpida desde el mes de agosto, pero la cifra actual, correspondiente al primer mes de gobierno de Javier Milei, casi duplica a la de noviembre y cuadruplica a la de octubre. El golpe no fue igual para todos los negocios: “el rubro publicidad y marketing, y las financieras, mostraron un incremento estable en los últimos meses”, señala el documento.
En términos mensuales (comparando con noviembre), entre los rubros más afectados se ubican ‘Viajes y turismo’, que cayó más del 20%; y ‘Eventos’, ‘Estética en general’ e ‘Inmobiliaria’, con caídas superiores al 10%.
En la industria la situación fue peor: en el informe sobre la actividad industrial publicado el pasado 23, el CECIS marcó un descenso del 22,43% interanual, siendo ‘Metalúrgica’, ‘Gráficos’ y ‘Construcción’ los más afectados, con un deterioro superior al 20%
En diciembre se duplicó el retroceso de noviembre y multiplicó por siete el de octubre.
Las ventas minoristas de los comercios pymes también sufrieron en diciembre, con un descenso del 11,15%, siendo el peor mes de un 2023 en que todos los meses fueron negativos. ‘Electrodomésticos y artículos electrónicos’ perdió un 15,44% de ventas, ‘Indumentaria’ y ‘Ferretería, materiales eléctricos y materiales para la construcción’ perdieron más del 14% y ‘Artículos deportivos y de recreación’ un 13,55%.
Y es que según el mismo Centro, la Canasta Básica Alimentaria trepó un 27% en diciembre, casi duplicando el indicador de noviembre. El porcentaje de variación de ‘Almacén’ fue del 36,88%; de ‘Carnes’, un 18,59%; de ‘Lácteos’ un 28,95% y de ‘Verduras, Frutas y Huevos’, un 4,08%.
Contra el paro general
La precaria situación comercial de la ciudad no fue un limitante para que el CECIS se pronuncie en contra del paro general y movilización, realizado el pasado miércoles 24. Así lo hizo, mediante un comunicado, en el que rechazó “la medida de fuerza per se, sin que se generen propuestas de ideas alternativas que nos permitan debatir con respeto mutuo”.
“Entendemos que la crisis que nos toca transitar, afecta a todos los sectores de la producción del País, y golpea fuertemente a los más vulnerables”, expresó el Centro Empresario y convocó a “hacer propuestas alternativas a las que se plantean, como una manera para que entre todos encontremos la solución con el menor costo social posible (…) Con el objetivo principal de propender al bienestar general de la comunidad, y en especial de los que menos tienen, y no solo en beneficio de los intereses sectoriales”.
“Hay leyes que hay que eliminarlas”
“Es imprescindible una actualización de la legislación laboral, que este acorde con las necesidades y los requerimientos de los tiempos que vivimos”, proclamó el comunicado por la huelga del 24.
Más preciso fue Sergio Saleme, Secretario del CECIS, en su intervención virtual ante el plenario de comisiones de la Cámara de Diputados, con motivo de la “Ley Ómnibus” y el Decreto de Necesidad y Urgencia firmado por Milei: “pensamos que las restricciones que la normativa viene a liberar permiten que el mercado laboral se adapte de manera más efectiva y ágil a la productividad y heterogeneidad propia de cada sector y cada actividad”.
Luego de esa introducción enumeró las modificaciones laborales pretendidas por el empresariado local, acusando a la ley laboral vigente de “conspirar” contra la generación genuina de empleo en el país. Citó como ejemplo los costos indemnizatorios “por desvinculación laboral”, los cuales son “injustos y desigualitarios” y lleva a que muchos trabajadores “pretendan hacerse despedir”, al contrario de aquellos que renuncian y “no reciben nada”.
Así también pidió “modificar la Ley 23.551, especialmente lo que hace a la duración y la alternancia y periodicidad de los cargos de los dirigentes sindicales”. “Hay que eliminar esas leyes -continuó, refiriéndose a las que combaten el empleo no registrado – y entender que los derechos laborales se defienden cuando hay actividad económica creciente”.
También apuntó contra los convenios colectivos de trabajo y pidió que se discriminen según empresa y región; solicitó “un sistema tributario más eficiente”, un “nuevo marco de coparticipación fiscal”, “potenciar las economías regionales” y eliminar las retenciones a los productos primarios, “simplificar la burocracia del Estado y permitir que los empresarios puedan producir más y mejor”, entre otros.