A través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 846/2024, el Gobierno nacional cambió las reglas para canjes de deuda.
Publicado el pasado 20 de septiembre en el Boletín Oficial, la nueva reglamentación permite al gobierno reestructurar deuda sin cumplir los requisitos fijados en el artículo 65 de la Ley de Administración Financiera (LAF) ni pasar por el Congreso de la Nación.
Este artículo, que plantea que el Poder Ejecutivo puede reestructurar deuda “en la medida que ello implique un mejoramiento de los montos, plazos y/o intereses de las operaciones originales”, ya había sido evadido en la gestión de Martín Guzmán, con el Decreto 331/22, pero en lo que refería a deuda en pesos, fijada en función de un valor técnico.
Ahora, en el mismo DNU, el gobierno de Milei establece que “los precios de los instrumentos serán fijados teniendo en cuenta los valores existentes en los mercados para cada una de las operaciones”, “independientemente de su moneda de pago”.
“Con la eliminación de este artículo no queda establecida ninguna pauta para renegociar la deuda. Esto implica que, ante una reestructuración, pueda producirse un incremento en el monto adeudado, aún respetando el cupo de deuda autorizado por el Congreso”, indicó en un comunicado el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
Además, desde CEPA indicaron que esto “podría ocurrir estirando plazos, pero ofreciendo mayores tasas, lo que empeoraría el valor presente neto de esa deuda reestructurada, pudiendo resultar ruinoso para el país en determinadas circunstancias”.
CEPA también hizo hincapié en que “debe existir una exigencia, requisito o pauta de parte del Poder Legislativo para la tarea encomendada al Poder Ejecutivo. De lo contrario, se trata de una habilitación sin controles: un cheque en blanco”.
En ese sentido, el centro de estudios mencionó el “mega canje” realizado por Federico Sturzenegger en 2001, cuando fue Secretario de Política Económica del gobierno de Fernando De la Rúa. “Sturzenegger fue procesado por una maniobra que favoreció a sus amigos, unos 7 bancos que cobraron comisiones por USD 150 millones, por hacer de intermediarios de sí mismos”, indicó CEPA.
Se trató de los bancos Francés, Santander Central Hispano, Galicia, Citigroup, HSBC, JP Morgan y Credit Suisse First Boston.
Sturzenegger es ahora Ministro de Desregulación y Transformación del Estado.
Renovación parcial
Por primera vez desde el inicio de la actual gestión de Javier Milei, el Ministerio de Economía no pudo renovar la totalidad de los vencimientos de deuda en pesos. Este miércoles, en la última licitación de septiembre, recibió ofertas del mercado por un monto inferior al de los pagos a afrontar.
Renovó el 67 % de los 7,1 billones de pesos que vencían. Así, la Secretaría de Finanzas dejó liberados al mercado 2,32 billones de pesos.
Las autoridades afirmaron que «los bancos tienen una mayor demanda de liquidez que los lleva a reducir su financiamiento al sector público para sostener la expansión del crédito privado de las familias y las empresas».
Economía ofreció un menú de 11 títulos compuesto por 8 letras de capitalización (Lecap) con vencimientos en octubre de 2024 y a lo largo de 2025, un bono de tasa fija hasta 2025 (Bonte) y dos bonos ajustados por inflación (Boncer) hasta 2025 y 2026. Las Lecap se adjudicaron con tasas de entre 3,75% y 3,98%; lo que podría marcar cierta resistencia a bajar la inflación del 4%.