La Circunscripción Militar Sur de Rusia (CMS) detectó el 25 de noviembre un avión espía estadounidense P-8A Poseidonun que se acercaba a la frontera de ese país.
Un caza ruso sobrevoló el objeto aéreo tras lo cual el aparato «cambió su rumbo y se alejó del espacio aéreo de Rusia», dice el comunicado de la CMS.
Michelle Baldanza, portavoz del Departamento de Defensa de EEUU aseguró que la aeronave estadounidense «estaba operando en el espacio aéreo internacional y no hizo nada para provocar este comportamiento ruso».
Nikolay Antoshkin, coronel general ex vicecomandante en jefe de la Fuerza Aérea de Rusia considero que «el Poseidon es un avión de reconocimiento naval, por eso nuestro avión se levantó para chequearlo.
Los estadounidenses -agregó- no tienen nada que hacer en el Mar Negro, es un mar interno».