La secretaria general de la CTA y dirigente del MAP, Silvia Alcoba aseguró que en las barriadas “estamos en una situación límite donde los compañeros no dan más, tratamos de sostener a los compañeros para que no haya violencia por el hambre”. La gente “está cansada de ver que sus niños no pueden tomar la merienda o no pueden tener una cena”, agregó.
La necesidad y la crisis económica que atraviesa Río Cuarto y todo el país llevaron a que el Movimiento de Acción Popular asista con 27 merenderos en diferentes puntos de la ciudad. En diciembre del 2017 eran 17, y en enero de este año sumaban 22. Los cinco nuevos merenderos se encuentran en los barrios Brasca, 400 Viviendas, Jardín Norte, Alberdi y Oncativo.
Ya son más de 100 los comedores y merenderos en Río Cuarto gestionados por organizaciones sociales y familias.
“La crisis se profundiza día a día. Y ahora ingresan las personas que se quedan sin trabajo, y sin el sustento no les queda otra que acudir a los comedores y merenderos para tener que alimentarse. Nosotros somos una organización que podemos ayudar, pero el Estado tiene que estar presente para cubrir esas necesidades. Lamentablemente escuchamos que aumenta la ayuda social, pero cuando los vecinos van no la encuentran”, afirmó Alcoba.
Consultada sobre cuáles son las necesidades manifiestas en los barrios, dijo que “la primera necesidad es la alimentación, antes era ropa, pero ahora hay gente que no se alimenta”. “Existe una crisis que está golpeando a todos los sectores, pero las barriadas más populares son las más perjudicadas. Se acabaron las changas, las obras están paradas, se recortan los días de trabajo y los ingresos. Y con el valor de los alimentos no alcanza. Nosotros hacemos autogestión para ir sosteniendo los merenderos y donaciones, pero la crisis hace que también haya menos donaciones”, finalizó.
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