Donald Trump no para de abrir frentes de conflicto rompiendo o evitando los bloques y forzando las negociaciones nacionales bilaterales. Ahora, repuso una medida del bloqueo a Cuba. Se trata del Título III de la Ley Helms-Burton que permite reclamar en tribunales norteamericanos, alguna indemnización por las propiedades confiscadas a partir de 1959, año del triunfo de la Revolución. La Unión Europea, Canadá y México se opusieron porque «consideran que la aplicación extraterritorial de medidas relacionadas con Cuba es contraria al derecho internacional».
Además, amplió las sanciones a todos aquellos que compren petróleo a Irán y sancionó al Banco Nacional de Venezuela.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, indicó que han sido restringidas las transacciones y el acceso a dólares para el banco oficial venezolano. «EEUU ha tomado medidas para garantizar que las transacciones regulares de débito y tarjetas de crédito puedan continuar», dice el comunicado.
Petróleo
Con respecto a Irán, desde el 2 de mayo de este año quedan sin efecto las exenciones que había concedido a ocho países (China,Corea del Sur, Grecia, India, Italia, Japón, Taiwán y Turquía) respecto de las sanciones que aplicaría a quienes compraran petróleo iraní. Sanciones datan de mayo de 2018.
«El objetivo es muy simple -dijo la vocera de la Casa Blanca, Sarah Sanders-: privarle a este gobierno forajido los fondos que ha usado desde hace décadas para desestabilizar al Medio Oriente, y animarlo a que se comporte como un país normal».
Este mes, las ventas iraníes llegan casi a un millón de barriles de crudo por día, menos de la mitad de los 2,5 millones que llegó a exportar antes de mayo de 2018 y mucho menos de los 4 millones diarios que promedió en 2017.
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EEUU TAMBIEN EN LIBIA
El presidente Donald Trump dio su apoyo al mariscal Jalifa Hafter, líder del Ejercito Nacional Libio (ENL) que pretende deponer el Gobierno de Union Nacional impuesto por la ONU en 2011 tras el derrocamiento y asesinato de Muamar el Gadafi. La Casa Blanca confirmó mediante un comunicado que el pasado 15 de abril Trump habló por teléfono y «reconoció el papel significativo del mariscal de campo Hafter en la lucha contra el terrorismo y [para] asegurar los recursos petroleros de Libia.» Hafter controla la parte este del país y cuenta con el apoyo de Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Francia. A principios de abril, el ENL inició una avanzada sobre Trípoli, capital libia y sede del gobierno. En Libia existe el riesgo de «una conflagración generalizada alentada» por las divisiones internacionales, dijo el enviado de la ONU, Ghassan Salamé. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dio cuenta de 264 muertos y 1.266 heridos desde abril. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) estima el conflicto afecta a unos 1,5 millo-nes de personas, entre ellas, 500 mil niños.
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