Los Chalecos Amarillos siguen en las calles de Francia y llevan ya 30 semanas de manifestaciones en contra de las políticas del presidente Emmanuel Macron. El sábado pasado protestaron en París, Marsella, Lille, Montpellier, Ruan, Lyon y Toulouse. Las protestas continúan pese a las propuestas del gobierno de achicar algunos impuestos pero a cambio de, por ejemplo, jornadas laborales más extensas.