Paro Cívico del 11 de octubre
Sectores opositores al gobierno de Bolivia llamaron a un paro cívico para el 11 de octubre, “en defensa de la democracia” y en contra de leyes que consideran persecutorias como el proyecto de Ley Contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas. Para ello, se organizaron movilizaciones en las nueve ciudades capitales y El Alto.
El paro fue decidido en una reunión en la que participaron comités cívicos de varios departamentos, los expresidentes Carlos Mesa (2003-2005) y Jorge Quiroga (2001-2002) y referentes de otros grupos opositores
David Choquehuanca, vicepresidente de Bolivia, declaró: “Ellos están buscando impunidad, lo que el pueblo boliviano busca (es) justicia, lo que el pueblo boliviano busca es estabilidad, crecimiento económico y nosotros estamos para trabajar, para garantizar justicia, para garantizar estabilidad, para garantizar hermandad, unidad”.
Algunas autoridades departamentales y municipales promueven los paros y conflictos sociales para ocultar su mala gestión y corrupción. Financian comités cínicos sin representación para conseguir impunidad por las masacres, robos y represión del gobierno de facto.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) October 11, 2021
La coordinadora de organizaciones, colectivos y bloques urbanos de La Paz y El Alto ratificaron el apoyo al Gobierno de Luis Arce y se declararon en estado de emergencia: “asumimos varias determinaciones, una de ellas es estar en permanente movilización a partir del 10 de octubre, tampoco vamos a permitir que se obligue a acatar el paro, porque es una medida antipueblo y política”.
En un comunicado, manifestaron: “Salimos a las calles para oponernos a las fuerzas ultraconservadoras, fascistas que quieren orquestar un nuevo golpe de Estado contra el Gobierno democrático y constitucional; hoy, estamos aquí, la vanguardia de la revolución boliviana, los militantes del poder popular y desde el frente revolucionario por el cambio, sentenciamos: ¡nunca más golpes de Estado en Bolivia!”.
El día del paro, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, aseguró que casi en siete departamentos del país existió “absoluta normalidad”. “Cualquier enfrentamiento y cualquier herido que pueda existir en el departamento de Santa Cruz es clara la responsabilidad de quién es y es del señor Luis Fernando Camacho y del señor Rómulo Calvo (presidente del Comité pro Santa Cruz) que están incitando (y) están movilizando a grupos de choque”.
La contundencia de la medida se reflejó en Santa Cruz, con 50 “bloqueos” (cortes de calle), a la vez que hubo bloqueos esporádicos en otras regiones, desbloqueos, gasificaciones y enfrentamientos. En lugares como La Paz y Cochabamba, la Policía intervino con gases lacrimógenos y arrestó a manifestantes. Algunos sindicatos se plegaron a los reclamos, marchando en La Paz y advirtieron con seguir asumiendo nuevas medidas de presión en los próximos días.
El mismo día del paro, el presidente de Bolivia, Luis Arce, en un acto en Pando, dijo: “Con el patriotismo de hermanos y hermanas como ustedes, que son la inmensa mayoría de la patria, no volveremos a los periodos nefastos de nuestra historia, como fue el golpe de Estado de 2019 o como el que pretenden abrir nuevamente unas minorías”.
“¿Quién se rinde?”, fue el mensaje que Camacho publicó en sus redes sociales.
https://twitter.com/LuisFerCamachoV/status/1447514250000285697
“Wiphalazo”
El 12 de octubre, las organizaciones políticas y sociales afines al gobierno de Luis Arce, convocaron a un “wiphalazo”, como un acto de reivindicación de la wiphala y la defensa del gobierno masista.
Juan Carlos Huarachi, máximo dirigente de la Central Obrera Boliviana (COB), fue uno de los convocantes al acto oficial “en defensa de la democracia y los símbolos patrios” y planteó que las organizaciones sociales del país “no van a permitir que una vez más la derecha desestabilice” al Gobierno legítimo. “Para nosotros está totalmente claro que la derecha quiere reeditar el golpe de 2019 y no lo vamos a permitir, porque los golpistas no solo han roto la democracia sino que han aprovechado la pandemia para robar y saquear al Estado”. La COB también condenó los intentos de frenar y entorpecer las iniciativas de progreso económico llevadas a cabo por el Gobierno.
Evo Morales, expresidente de Bolivia, durante el acto central, dijo: “Hermanos y hermanas, ha empezado el separatismo desde Santa Cruz y aprovecho esta oportunidad (para decirles) que el 17 de septiembre de este año la Asamblea Legislativa Departamental de Santa Cruz aprobó una ley (para designar autoridades regionales de competencia nacional)”, “este es el inicio del separatismo nuevamente; (pero) el día de ayer, el pueblo boliviano nuevamente derrotó a los separatistas. Y esa es la mejor muestra de que el pueblo boliviano defiende la democracia, el pueblo boliviano está con la revolución democrática cultural”.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, mantuvo la misma línea: “Ellos intentan dividirnos, ellos buscan dividirnos y nosotros les decimos acá, desde la plaza San Francisco, desde todos los puntos donde se está viendo concentraciones de cientos de miles de bolivianas y de bolivianos, que el golpismo no pasará, aquí está el pueblo para defender su democracia”. “Hermanas y hermanos, ayer (lunes) el pueblo boliviano, una vez más, le dio una lección a la derecha golpista, asesina, antidemocrática. El golpismo quería parar y el pueblo boliviano le dijo ‘A trabajar’”.
Recientemente, la asamblea regional del Departamento de Santa Cruz, sancionó una ley que autoriza la designación de autoridades locales en distintos organismos, lo que llevó a que el gobierno de Arce inicie acciones legales por el delito de “separatismo”, apuntando fundamentalmente contra el gobernador del departamento, el también participe del golpe de 2019, Fernando Camacho.
Esto tiene que ver con que es potestad del poder central elaborar ternas de designación de autoridades como el fiscal departamental, representantes de la Defensoría, la Contraloría y la Procuraduría; vocales electorales y judiciales y un director anticorrupción.
El saldo de la movilización
El jueves 14, el gobierno boliviano decidió retirar el proyecto de Ley contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Andrónico Rodríguez, presidente del Senado, indicó que “no puede ser motivo de desestabilizar una ley, pero nos apena mucho que algunos sectores políticos tomen como una bandera política; sin embargo, nuestro presidente ha tomado la decisión escuchando al pueblo para que no se llegue a extremos de confrontación”.
Los únicos perdedores son los golpistas y racistas que se quedan sin excusa para continuar con su campaña de mentiras y agitación política que busca desestabilizar al gobierno elegido democráticamente del hermano @LuchoXBolivia. #EstamosSaliendoAdelante
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) October 14, 2021
Pese a los comentarios de los dirigentes del MAS, desde la oposición no dejó de verse como una victoria resultante de su movilización.
Gana Bolivia y pierden los autoritarios, los violadores de DDHH y los que creen que el pueblo no sabe defenderse. Vienen batallas por la justicia y la democracia. Ahí estaremos porque unidos lo podemos todo.
— Carlos D. Mesa Gisbert (@carlosdmesag) October 14, 2021
Esta semana, la Central Obrera Boliviana (COB) y el Pacto de Unidad ratificaron su apoyo a la gestión del presidente Luis Arce, por los logros económicos y sociales alcanzados durante su primer año de mandato, y se declararon en estado de emergencia para enfrentar cualquier acción desestabilizadora por parte de la derecha política.
Juan Carlos Huarachi, secretario ejecutivo de la COB: “La unidad de todos los sectores sociales va a ser para sacar adelante este país, que ha sido saqueado, ultrajado, humillado con actos de racismo y discriminación. El pueblo boliviano, a través de sus organizaciones sociales, le está diciendo basta, basta a estos actos de racismo, de discriminación, basta a estos actos de intentos de desestabilización a nuestro gobierno”.
Intento de magnicidio
El Gobierno de Bolivia denunció que existió un intento de magnicidio contra Luis Arce en octubre de 2020. El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó que integrantes del grupo que mató al presidente de Haití, Jovenel Moïse, estuvieron en Bolivia antes y después de las elecciones de octubre de 2020.
#Nacional
"Hubo intento de magnicidio (…) de nuestro presidente (Luis Arce) y no es coincidencia que (uno de los detenidos) en Haití, por haber participado en el asesinato del presidente (de ese país), haya estado (en Bolivia)", dijo Del Castillo. https://t.co/Z3PJaNVo4u— La Razón Digital (@LaRazon_Bolivia) October 18, 2021
Luis Arce respaldó la denuncia del intento de magnicidio: “A la derecha golpista, asesina, le vamos a responder con una frase de Marcelo Quiroga Santa Cruz: Sabemos que más pronto que tarde se cobrarán esto que estamos haciendo, estamos dispuestos a pagar ese precio (…) No tenemos miedo” y en el acto por el aniversario 98 de fundación la Fuerza Aérea Boliviana, llamó a evitar la consumación de “un nuevo golpe de Estado contra un gobierno del pueblo”.