C
on bloqueos y manifestaciones que incluyen multitudinarias marchas por más de una decena de trayectos y caminos en8 de los 22 departamentos del país, el pasado 9 de agosto comenzaron las protestas por el alto costo de vida, en defensa de la “Universidad del Pueblo” y contra la criminalización de quienes alzan su voz frente a las élites que controlan Guatemala.
Organizada por el Comité de Desarrollo Campesino, la Asamblea Social y Popular -que aglutina a varias organizaciones-, la Coordinadora General de Estudiantes de la Universidad San Carlos y el Comité de Unidad Campesina, entre otros participantes, marcharon bajo el lema “La Universidad es del pueblo, no se vende, se defiende”, consigna con la que exigen el derecho a una educación de calidad, pública y gratuita. La mayoría de los 200.000 estudiantes, demandan la elección de un nuevo rector de la Universidad San Carlos.
Mientras el Gobierno encabezado por Alejandro Giammattei, que comenzó el 14 de enero de 2020, debate en el Congreso la facultad de la policía y del ejército para empuñar las armas contra los manifestantes, las organizaciones sociales, indígenas, estudiantes y campesinos exigen la renuncia del presidente, su gabinete y el Congreso.