El ministerio de Finanzas de China informó el lunes que impondrá desde junio los aranceles a 5.140 productos provenientes de EEUU subirán del 5 al 25%. Es la respuesta a la imprevista decisión de Trump, de la semana pasada, subir las tarifas de importación de productos chinos del 10 al 25%. Luego, además, advirtió que China «no debería tomar represalias», ya que la situación «solo empeoraría». «Aconsejamos a EEUU que escuche la reacción de la comunidad internacional, que escuche las voces de los diferentes sectores y que calcule las pérdidas y las ganancias» para así «volver al camino correcto», que es «trabajar con China y encontrarse en un punto intermedio» que facilite un acuerdo, atemperó Geng Shuang, vocero del ministerio de Finanzas chino. Pero advirtió que «China no quiere de ningún modo una guerra comercial, pero no tiene miedo y si alguien nos trae una guerra lucharemos hasta el final».