E
l Centro de Investigaciones y Formación de la República Argentina (CIFRA) de la CTA, presentó el Informe de coyuntura en donde sostienen “los 60.000 pesos que las empresas mediano-grandes deben pagar sin ayuda estatal en dos cuotas para los trabajadores cuyos salarios netos sean inferiores a 400.000 pesos, implicarían un desembolso de unos 218.000 millones de pesos. Esto equivale al 1,2% de las transferencias de ingresos del trabajo al capital que las beneficiaron durante los últimos años”. En la comparación interanual, los salarios de los trabajadores registrados en el sector privado cayeron 1,1% durante el primer trimestre de 2023, y el mismo porcentaje en el segundo.
Así, a pesar de los vaivenes que se observan en la trayectoria salarial, el nivel de junio de 2023 es equivalente al de diciembre de 2019 (apenas un 0,2% superior). Se sostiene, así, la contracción respecto a noviembre de 2015 (-16,2%) que se produjo en el marco del gobierno de Juntos por el Cambio.
Los investigadores afirman que “desde que gobierna Alberto Fernández, el trabajo transfirió al capital ingresos por 70.000 millones de dólares, a los que debe sumarse casi la mitad de esa cifra durante la gestión de Mauricio Macri, hasta un total de 101.000 millones de dólares”. Esto se debió a un crecimiento de la rentabilidad de las grandes empresas oligopólicas. Entre 2016 y el primer semestre de 2023, los precios de las ramas altamente concentradas ascendieron 15% por encima del índice de precios al consumidor, aunque sus costos salariales cayeron 24%; Los precios de las ramas concentradas con predominio de grupos económicos crecieron 26% más que el IPC, mientras sus costos salariales cayeron 33%. Allí agregan que los balances de los principales grupos económicos exhiben una altísima rentabilidad sobre ventas en la primera parte de 2023: Ternium, del Grupo Techint, (30,3%), Aeropuertos Argentina 2000, de la Corporación América (28,3%), Arcor (12,8%), Molinos Río de la Plata, del Grupo Pérez Companc (9,6%).
Estima CIFRA que son medidas de corto plazo que, en un contexto de alta inflación, harían que el haber mínimo real de septiembre fuera 20% inferior al de diciembre de 2019 y 33% menor al de diciembre de 2015.