E
l presidente norteamericano Donald Trump, mientras pelea con la FED por las tasas de interés, pretende ponerle fin a la guerra en Ucrania y firma aranceles para productos que ingresen a su país. No se salva Argentina, señaló en su despacho.
EEUU es un importante comprador de acero y fundamentalmente aluminio del producido en estas tierras. Además, Luis Caputo anuncia que el acuerdo con el FMI avanza y que consistirá en dinero fresco, pero que no implicará deuda. Mientras, un sector plantea que el precio del dólar está estancado.
Es que para el mercado financiero hay buenas tasas, pero para que se cobren, se necesita liquidez en las reservas del BCRA.
Concretamente la ‘torta’ tiene límites y los que pretenden comerla presionan para valorizar su porción en esa renta. Es esta la disputa principal que nos trae, a los de a pie, al derrotero permanente de mirar desde atrás de qué manera los ingresos no alcanzan.
Trump, la FED, el FMI, los aranceles y la guerra aún en curso, es parte de la crisis que se profundiza. Aún falta mayor pelea desde abajo para que la cancha no la sigan marcando –con su lucha– los de arriba.